Un nuevo negocio: 1960-1989
Las décadas de 1960 hasta 1980 estuvieron marcadas por la transformación en Bosch, convirtiéndola en un grupo diversificado con divisiones autogestionadas, una empresa global y el líder del mercado en electrónica automotriz.
Estructura nueva: se conforman las divisiones
Entre 1950 y 1960, la cantidad de asociados de Bosch aumentó de 15,000 a 70,000. La estructura centralizada de una mediana empresa ya no era suficiente, por lo que durante la década de 1960 los campos de negocios se volvieron gradualmente más independientes, comenzando con la división de herramientas eléctricas (Power Tools). Durante este período de auge económico y pleno empleo, Bosch realizó adquisiciones en otros sectores y miles de asociados se capacitaron para la fabricación de instalaciones eléctricas para automóviles.
Desde la hidráulica hasta el embalaje
Aunque estaba en auge la industria automotriz en el mercado más importante para Bosch en ese momento, Europa occidental, la unidad de diversificación hacia otros sectores seguía siendo importante. Después de pasar a la hidráulica móvil, la electrónica médica y la tecnología de radio durante la década de 1950, Bosch compró una empresa de maquinaria de envasado en 1963 y amplió sus actividades con nuevas adquisiciones para formar la división de tecnología de embalaje (Packaging Technology).
El legado del fundador: Robert Bosch Stiftung
Investigación, desarrollo y adquisición: con el poder de la innovación
Bosch reunió sus recursos de investigación y desarrollo en un nuevo centro de investigaciones, en el año 1968. Este esfuerzo combinado fue necesario para que germinen las ideas que Bosch más tarde convirtió en productos innovadores que le dieron la ventaja competitiva. Desde mediados de la década de 1960, los propios institutos de investigación de la empresa se centraron también en proyectos especiales, como los circuitos integrados.
Jetronic
La electrónica asume el control
En 1959, Bosch comenzó a desarrollar un sistema de inyección de gasolina controlado electrónicamente. Jetronic fue el primer sistema de su tipo en el mundo que pasó a la producción en masa en el año 1967. Se usó por primera vez en las versiones estadounidenses del Volkswagen 1600 LE y TLE. Gracias a Jetronic, el VW 1600 fue capaz de satisfacer las regulaciones ambientales relativamente estrictas que se habían introducido en EE. UU. Estado de California.
Fotografía: tablero de una unidad electrónica de control Jetronic para inyección de gasolina en el laboratorio de electrónica del Schwieberdingen Technical Centre, cerca de Stuttgart (1970)
Semiconductores y autos computarizados: la electrónica en Bosch
La determinación de los investigadores y gerentes de convertir a la electrónica en una parte clave de la compañía comenzó a dar frutos a partir de la década de 1970, y ese territorio originalmente desconocido ha moldeado el éxito de toda la empresa hasta el día de hoy. Un buen ejemplo de esto es el sistema de frenos antibloqueo ABS, lanzado en 1978, que Bosch convirtió en un estándar técnico en ingeniería automotriz gracias a su experiencia en electrónica digital.
Pensando a nivel global: un comienzo nuevo en EE. UU. y Asia
En Estados Unidos, la economía más grande del mundo, llevó a Bosch hasta 1983 obtener los derechos de uso completos restablecidos para su propia marca. Esto allanó el camino para que la empresa vuelva a lograr el éxito que había tenido en ventas. En Asia, Bosch estableció su presencia de una manera especial. Fabricó de una forma más económica productos de alta calidad, como tecnología fotográfica y de video, en países como Malasia. También conformó empresas en participación en los mercados clave, como Japón. Allí, Bosch comenzó a fabricar el sistema de inyección electrónica de gasolina en 1973 y el sistema de frenos antibloqueo ABS en 1984.
El captador lambda
Sniffers sensibles
En 1969, los expertos de Bosch comenzaron a desarrollar un sensor para medir los gases de escape, que se estableció dentro de una buena década después de los problemas iniciales de la dentición. Hoy día, los motores de combustión respetuosos con el medio ambiente ya no son concebibles sin el captador lambda, que entró en producción en 1976. Esta innovación de Bosch fue el requisito previo para el tratamiento de escape con convertidores catalíticos de tres vías. El captador lambda mide el contenido de oxígeno en la corriente ascendente de gas de escape del convertidor catalítico. Este valor, que fluctúa constantemente de forma espectacular según la situación de conducción, se utiliza mediante el control electrónico del sistema de inyección para ajustar la composición de la mezcla de gasolina-aire. La precisión del sistema garantiza una combustión completa, lo que permite que el convertidor catalítico limpie de forma óptima los gases de escape. Esto puede reducir las emisiones dañinas hasta un 90 por ciento.
Fotografía: prueba funcional de los prototipos de captadores lambda en el Schwieberdingen Technical Center (1975)
Telecomunicaciones: un nuevo enfoque
A comienzos de la década de 1980, Bosch se aventuró a las telecomunicaciones y comenzó a construir tecnología para satélites espaciales y teléfonos celulares e implementando redes de telecomunicaciones públicas y privadas. Después de dos décadas exitosas de este sector, que generó hasta el 25 por ciento de las ventas de la compañía, los desarrollos desfavorables llevaron a Bosch a retirarse de varios segmentos. La división Security Systems siguió en competencia y conserva su éxito hasta el día de hoy.